E scogiste establecerte en Armenia (Ant) allí,
D iariamente atendía su próspero negocio
Ú nico en su género; lo que no se encontraba
A llí, había que buscarlo en
la capital. Te
R odeaste de excelentes seres como familia y
D ejaste en ellos el legado
de la honestidad y
O tros valores que ahora ellos trasmiten totalmente
A las nuevas generaciones,
que sin duda conocen
L os Renglones Torcidos de Eduardo, su obra escrita;
F ácil de leer y asimilar, aporta datos históricos que
O tros no se atreven por guardar la línea, que él
N unca veneró; con una
generosidad ilimitada, de
S u alcance, dan fe sus coterráneos que día a día,
O bservaron como fue de los pocos seres
Q ue sirvieron de referente por tu servicio y carisma
Ú nicos, que trasmitiste
fielmente a tus herederos quienes
I niciaron basados en tu
ejemplo, hogares
C olmados de amor, respeto y arduo trabajo.
E stuviste siempre muy cerca de los tuyos,
N o escatimaste esfuerzo
alguno para en toda
O portunidad aportar lo mejor de sí a sus semejantes.
O pinabas de todos los temas con autoridad y
S apiencia, que adquiriste
en la vida cotidiana y
O tras fuentes que tu solo conocías, porque muy
R aramente los que te consultaban, regresaban en
I dénticas condiciones, por
el contrario, solían traer a
O tros para despejar sus dudas. ¡Que linda labor lograste!